Fuegoterapia. Charlar o relajarse mirando al fuego con tu mejor vino o copa en la mano.

Aguaterapia. Os sorprenderá la nueva zona de agua con jacuzzi, sauna y pasillo de duchas. Otro pequeño capricho.

Cenaterapia. Si por algo merece la pena venir a la Posada es las cenas que prepara Toñi.

Llevamos 25 años y sabemos que no es ni la mejor ni la más bonita de las miles que hay en España pero lo que sí sabemos es cuidar de vosotros como se hacía en los pueblos, como toda la vida. Intentamos ofreceros un pedacito de aquella vida rural, sin prisas con bar y Restaurante exclusivo para los alojados. Creemos que esta es la idea de lo que se desea en el auténtico Turismo Rural, no solo una posada acogedora sino personas que se preocupen de ti durante tu estancia. Si piensas así, aquí tienes tu casa.