La micología es uno de los recursos naturales más importantes de las comarcas de Pinares y El Valle. Setas de cardo, boletus, níscalos, amanitas, trompetas de la muerte, senderillas… son muchas las especies que se pueden coger en nuestros montes. No obstante, es importante saber que a la hora de ir a por setas debemos ser extremadamente cuidadosos con el medio ambiente y proteger nuestros montes si queremos que este recurso perviva en el tiempo.

Por ello, si te estás iniciando en el mundo de la micología, aquí te dejamos algunos consejos y recomendaciones para ayudarte a practicar una recolección legal, responsable y respetuosa. 

Cesta de mimbre

Es importante ir bien equipado. Siempre deberás levar una cesta de mimbre, ya que de esta manera nos aseguramos que las setas que recojamos podrán seguir esparciendo sus esporas para asegurar la próxima temporada. Tampoco puede faltar una navaja y ropa y calzado de montaña.

Recolección responsable

No arrases. Sé un poco solidario y llévate a casa solo las setas que vayas a consumir. Te en cuenta que la conservación de los hongos es limitada y sería una pena tener que tirarlos cuando otros podrían haberlos aprovechado.

No dañar los ejemplares

No les pegues patadas ni las dañes. Si una seta no es comestible o mortal, no le des una patada. Esta seta cumple una función en el ecosistema y tienes que dejarla. Por pisarla no vas a salvarle la vida a alguien. Es más, biólogos recolectan setas de todo tipo para realizar estudios sobre ellos, así que vamos a ponérselo fácil y no arruinar su trabajo.

Acompáñate de un experto

Una guía de setas puede ayudarnos, pero las primeras veces que vayas al monte lo aconsejable es que te acompañe alguien experto que te ayude diferenciar las setas y te indique cómo manejarte. En cualquier caso, si acudes solo al monte, es importante que recolectes solo las setas que conozcas con facilidad.

Coger los ejemplares adecuados

Ni muy viejos ni muy jóvenes. No conviene coger ejemplares demasiado pequeños porque rendirán más en el futuro, y tampoco viejos, porque son indigestos y además son los principales productores de esporas y los que las diseminan por el medio.

Cuidado con la orientación

Buscando setas es fácil perder el rumbo porque se va mirando al suelo. Por eso, hay que conocer muy bien el terreno y, si no es así, tener la precaución de no alejarse de los caminos o, al menos, tomar referencias. El GPS es una gran ayuda, incluso algunos programas van guardando nuestra huella en el recorrido de pantalla, pero hay que tener en cuenta que pierde referencias cuando nos introducimos por desfiladeros o nos tapan las montañas, y que, a veces, al estar metidos en zonas boscosas, el satélite no lee bien nuestra presencia.